Decorar con negro, un toque diferenciador del estudio de interiorismo de Barcelona, Tinda’s Project

De entrada, la primera impresión cuando se habla de introducir el color negro en la decoración de un espacio suele ser de negación. En Tinda’s Project lo tienen comprobado, pero también saben que cuando les dan la confianza de implementarlo, el resultado final enamora al cliente. Y esa primera reacción tan generalizada es fruto de las connotaciones más tradicionales vinculadas al negro (luto, oscuridad…) pero, cuando hablamos de interiorismo, la visión ha de cambiar.

Y aunque también en este sector el color negro podría decirse que roba la luz y empequeñece los espacios como alegaciones negativas, solo los profesionales saben cómo tratar esos aspectos y darles la vuelta para que no representen un problema. En este sentido, siguiendo ese ejemplo, se trata de aplicar el color negro solo en aquellas estancias donde haya mucha luz y nunca si sus dimensiones son reducidas.

Para el estudio de interioristas de Barcelona, Tinda’s Project, el color negro tiene un potencial enorme por las connotaciones que conlleva en sí mismo en cuanto a elegancia, misterio, sensualidad… En decoración, además, representa ese toque de lujo y sofisticación que piden muchos de sus espacios.

Sin duda, “es un color de una gran personalidad que no posee ningún otro”, declara Eva Mesa, quien añade que otra de sus características es que es neutro y, por tanto, “lo podemos aplicar en cualquier estilo decorativo”. También es atemporal, “por eso, a lo largo de los años, casi nunca falla en nuestros proyectos”.

Precisamente por todas esas características, el color negro presume de una gran versatilidad. Esto significa que, bien trabajado, siempre se mostrará acertado. Y ese trabajo empieza por aplicarlo en pequeñas dosis, nunca en exceso. Por ello resulta ideal en accesorios y detalles decorativos, capaces de atraer todas las miradas, precisamente, por ese toque de distinción que lo resalta por encima del resto de elementos.

Sucede que, combinado sabiamente con tonos claros, se genera una armonía visual muy especial y, al mismo tiempo, se potencia la intensidad que se le quiere dar a la pieza negra e incluso también se refuerza el efecto de enmarcar un rincón determinado.

Pero, dentro del trabajo que desempeña un interiorista, destaca el hecho que sabe que se puede ir más allá y aplicar el negro en dosis más amplias, siempre controlando su integración en el conjunto a sabiendas que vamos a conseguir el efecto deseado. Y sobre todo, estudiando bien la luz, que es la que ayudará a suavizar el ambiente general.

Así, se suele aplicar el negro a todo un frontal de la estancia -ya sea como pared pintada, revestida o amueblada- para dar profundidad visual y espacial. Un efecto que también se puede lograr en piezas de menor envergadura, como puede ser un mueble o los peldaños de una escalera, considerada la pasión de los interioristas.

Otro de los aspectos que hay que destacar de los proyectos del estudio de interiorismo de Barcelona, Tinda’s Project, es el uso de materiales con textura. “Esos que cuando los tocas, te transmiten sensaciones”, comenta Eva Mesa. Y casualmente el color negro es ideal para combinarlo con este tipo de acabados con texturas, ya sea la madera lacada de un mueble, un papel pintado o el revestimiento de una pared o una pieza cerámica. ¿Por qué? Por que enfatizan ese efecto sensorial.

Como bien dicen los manuales del Feng-Shui, el color negro tiene, entre otras, la capacidad de inspirar prestigio, un símil que trasladado a Tinda’s Project justifica esa diferenciación de la que presumen sus proyectos de interiorismo.

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