Cómo colocar los sofás en el salón
El salón es la estancia de la casa donde pasamos más tiempo y, dentro de ésta, el sofá es el elemento de mobiliario más importante de la zona de estar, ya no solo por su peso visual, sino porque su colocación y dimensiones va a determinar la distribución del resto de elementos. En este sentido, podría decirse que cuando reformas o proyectas el salón, lo primero en lo que piensas es dónde irá el sofá -o sofás o la combinación con sillones, butacas, pufs, etc-, aunque para responder a ello hay que previamente analizar el salón, sobre todo, tener en cuenta su tamaño y su forma. Y no hay que olvidar, además, que lo habitual es que el espacio que alude al salón incorpore también la zona del comedor.
Obviamente, los metros cuadrados que dispongamos en el salón determinarán el tamaño del sofá para que sea proporcional respecto al espacio y a las otras piezas que deben incluirse. Puede pasar también que el salón tenga forma cuadrada o rectangular o alguna pared curva o incluso que sea de planta irregular; esto también influirá en la elección de un sofá u otro. Y otro aspecto es saber qué uso se le va a dar según las necesidades de esa casa, es decir, cuántos sois, si recibís muchas visitas, si queréis que incluya una chaise longue, si se usará solo para ver la tele o también para dormitar, etc.
Y, afortunadamente, el mercado de los sofás ofrece tantas posibilidades, que podría decirse que hay un sofá para cada necesidad, según todas estas variables. Así que, tranquil@s!
Antes de elegir el sofá, estudia la forma del salón
Una solución muy práctica y sencilla como primer paso es, sobre el terreno, es decir, pisando el propio suelo del salón, coger cinta de carrocero y marcar en el suelo la forma y dimensiones del sofá allá donde tengamos pensado colocarlo. Hay quien prefiere visualizarlo con planchas de cartón, que también son más fáciles de mover sobre el suelo y valorar varias opciones. Porque aunque sobre el plano del proyecto, el interiorista ya te haya ubicado el sofá, está solución resulta muy práctica y te puede ayudar ‘in situ’ a hacerte una idea mejor de cómo quedará.
Como decíamos, la forma del salón influirá también mucho en la distribución de los elementos que incluiremos, entre ellos, el sofá. Así, un salón rectangular o alargado permite crear diferentes ambientes, uno de ellos dedicado a la zona de estar, donde estará el sofá que, precisamente, puede actuar de separador. Si el salón es cuadrado, tenderemos a unificar el ambiente y para ello, piezas voluminosas como el sofá se colocarán contra la pared para despejar al máximo la zona central. En el caso de un salón de planta especial, hay que valorar dicha singularidad en cada caso, pudiendo ser una pared curva, un gran ventanal, una superficie trapezoidal, etc.
5 opciones dónde colocar el sofá
En líneas generales, el sofá forma un tándem con el televisor para dar vida a esa zona donde se disfruta cómodamente de las últimas series o para ver las noticias, de ahí que se suelan situar enfrentados. En cómo integrar el televisor en el interiorismo del salón te damos varias ideas. Aunque somos conscientes que también hay muchos hogares donde no hay televisor y, por tanto, la situación del sofá está menos condicionada en este sentido.
En cualquier caso, la ubicación del sofá podría establecerse a partir de las siguientes opciones:
- JUNTO A LA PARED. Es la más recurrente, ya que ayuda a despejar el resto de la estancia. Además, de esta manera también focalizamos cierta atención en la pared donde se apoya el sofá protagonizándola con algunas piezas decorativas especiales, como podría ser un cuadro o un espejo, por ejemplo.
- CON EL RESPALDO ‘AL AIRE’. Es decir, que no se apoye en ninguna pared y generando una zona de paso a modo de pasillo por detrás; para ello hay que dejar, mínimo, 90 centímetros. La trasera del sofá puede dejarse tal cual o puede permitir que se le apoye un mueble no muy ancho y de una altura similar a la del sofá. Se utiliza mucho como separador de ambientes, entre la zona de estar y la zona del comedor, aunque también te mostramos otras ideas para separar ambientes.
- SOFÁS ENFRENTADOS. La idea es crear un espacio cerrado que invite a la conversación, con lo cual, es habitual cuando no hay televisor. Y quien dice dos sofás, dice un sofá frente a dos butacas. Eso sí, la distancia mínima frontal ha de ser de unos 2,5 metros.
- FRENTE A UN ELEMENTO CONCRETO. Éste representa un incentivo visual que disfrutar desde el sofá, ya sea el televisor, un gran ventanal con vistas o la chimenea. Por cierto, ¿quieres saber las 5 claves para elegir tu chimenea?
- DEBAJO DE LA VENTANA. Hablamos de ventanas que no llegan hasta el suelo y su apertura no interfiere el sofá, cuya altura del respaldo quedaría por debajo.
Sofás en ‘forma de L’, con chaise longue, combinar con butacas, añadir pufs…
Una vez ya tenemos claro dónde situaremos el sofá, el espacio disponible es el que determinará su tipología (tamaño, forma, etc.). Lo habitual es optar por un sofá de x metros para alinearlo junto a la pared más larga del salón. Si el espacio lo permite y las necesidades exigen más asientos, se puede combinar con otro independiente para crear la llamada distribución ‘en forma de L’ o incluso con tres, para una ‘forma en U’.
En el caso de optar por una chaise longue, se ha de situar lo más lejos posible de la puerta para dar mayor sensación de amplitud visual y para no interferir en la zona de paso.
La combinación de sofás permite jugar con varios tamaños y también con otros tipos de asientos, como butacas o sillones, o incluso incorporando asientos extras muy versátiles como son los pufs y que también pueden utilizarse como mesas auxiliares, siendo además más fáciles de mover.
Y a las habituales líneas rectas de un sofá se pueden incorporar otras formas con curvas o asientos redondos, muy recomendables para aquellos salones de planta irregular o que incorporan elementos constructivos especiales; así, la mezcla de líneas rectas y curvas ayuda a equilibrar visualmente el espacio.
Y otro apunte. Si tienes claro que quieres/necesitas que el sofá sea también cama, la oferta es también muy amplia y seguro que encontrarás el que mejor te vaya. Solo ten muy en cuenta las medidas cuando se abra, no vayas a tener que mover muebles cada vez.
A todo esto, no hay que olvidar que la mayoría de fabricantes ofrecen la posibilidad de los sofás a medida, un recurso que caracteriza todos los sofás de los proyectos del estudio de interiorismo de Barcelona, Tinda’s Project, y que ilustran este post.
Fotos portada, 1, 3, 4 y 5: ©Mercè Gost. Foto 2: ©Jordi Canosa.